Pitido final(13)
Por “Quin” 07/04/2017
Se me ocurrió escribir éstos relatos sobre el fútbol que se practicaba en Arija antes de existir el Pantano del Ebro, que es una referencia fiable para situarnos en el tiempo, apoyándome en lo escrito bajo el título Arija F.C. (Como el Real Madrid y el Fútbol Club Barcelona), porque consideré que lo había desarrollado y contado mal. Por eso, éstos relatos los he titulado “Igual pero… diferente”, pensando en contar lo mismo pero de diferente manera: más ampliado y con más detalles, aunque con la misma verdad.
Se trata de vivencias escuchadas, vistas y protagonizadas por mí en Arija, en el tiempo en que la Confederación Hidrográfica del Ebro nos dejó vivir por aquellas tierras hasta que, el Pantano del Ebro, nos dio un puntapié en “salva sea la parte” expulsándonos definitivamente de donde vivíamos muy alegremente.
Es una pena no tener a la vista más fotografías de Arija de aquella época, pues me habrían reavivado recuerdos que me servirían de apoyo para contar muchas cosas sobre las gentes de aquel entonces que, en los tiempos cuando viví por allí, las había ¡muy interesantes! y muy ¡chirenes! Las gentes de Arija de aquella época llegaron a formar, en todos los aspectos, “un pueblo a imitar”.
Antes de terminar estos relatos quiero decir cuatro cosas de las que se habla mucho, sin que nadie se ponga de acuerdo. Es una pequeña inquietud que tengo, quizá “obsesiva”, en que, “en las escuelas y colegios” (que no deben olvidar la enseñanza del Catecismo Cristiano) está “la clave” para el progreso y la buena armonía en la calle, en los hogares y en nuestra nación.
Toda la buena convivencia del pueblo de Arija que se iba formando al respaldo de Cristalería Española procedía de dos o tres cosas.
La primera era la buena enseñanza moral y religiosa que todos los chavales recibían en las escuelas de mano de sus honrados y religiosos maestros y maestras. No hace falta ser una eminencia para enseñar bien a los chavales. Los maestros de Arija cumplían a la perfección su cometido poniendo, a la vez que sus conocimientos, “honradez y tesón” a su profesión, con la plena confianza y autorización de los padres de los alumnos para que reprendiesen a sus hijos en las malas acciones.
Los maestros y maestras de Arija se preocupaban por sus alumnos. Conocían muy a fondo las debilidades y las virtudes de cada chaval y con eso sabían cómo debían tratar a cada uno. Así, a la primera tentativa de acoso escolar, que era fácil de detectar porque los chavales estaban constantemente vigilados, lo cortaban de raíz regañando delante de toda la clase a quien lo hacía. Esa simple advertencia, delante de toda la clase, era suficiente para que el acosador desistiese de incordiar al compañero.
Hoy día los mismos padres han cortado toda la autoridad a los profesores. Ya no se confía en ellos. Y además están encantados que a sus hijos les quiten la disciplina, los deberes, las clases de religión, y las buenas costumbres. “¡A mi niño que no me lo toquen!” Pues... ¡vale!... ¡vale!... Después, que los padres no se quejen que su niño le sale... “torcido”.
Y ya, para que los niños salgan definitivamente “torcidos”, los jueces, obligados por los legisladores, dictan sentencias en contra de la autoridad paterna. Así que los chavales no solamente salen “torcidos” sino que salen ¡retorcidos!
En la Arija que conocí, por la moral recibida en las escuelas, no había violencia contra las mujeres. A las chicas jóvenes, en vez de maltratarlas, se las piropeaba y se las decía cosas bonitas donde fuese: en el baile, en el cine o paseando por la calle. Todos los mozos eran “amigos” de “todas” las chicas.
En Arija no había violencia de género. A las chicas se las piropeaba por la calle y las casadas eran respetadas por sus maridos. Lo que no quitaba para que, de vez en cuando, éstos, hacer “sus juergas”.
Personas identificadas: Arriba: 1-Antonio López (hermano de Pedro), 2-Ricardito, 3-Esther González, 4-Tere, 5- Vitín. Abajo: 6-x, 7-Aurora Herrero, 8-La Rubia, 9-Ulpiano, 10-Amparito Mencía, 11-x, 12-Juanita González, 13- (músico)
En esto de la “violencia de género” las mujeres deben saber con quién se juegan los cuartos. Sabemos que intervienen muchos condicionantes pero hay tres muy peligrosos: “el alcohol”, “los celos” y “las enfermedades psíquicas”.
Si a un hombre le gusta el “trinque”... ¡malo!...
Si un hombre es un “psicópata”... ¡peor!...
Y si un hombre padece de “celos”... ¡hum!...
En cuanto al de los celos puede intervenir mucho el mal concepto que se tiene de la moral y la sexualidad. Lo mismo por parte del hombre como de la mujer.
Hay mujeres, tertulianas en la televisión, (que tanto poder tiene para influirnos en los malos comportamientos), que alientan a sus congéneres con charlas diciéndolas que es un derecho usar la sexualidad cuando las apetezca, donde las apetezca y con quien las apetezca, aunque sea a primera vista y con un desconocido. ¡Bueno! ¡Bueno! ¡Bueno! ¡Pues!... ¡muy bien!... que sigan así y la violencia de genero irá en aumento.
Una de las cosas que el hombre no tolera es que le engañen en amoríos. El hombre reacciona como un gorila. (La mujer suele ser más “pacífica” en esto) De siempre ha sido así. Y en esto, el hombre, sí que tiene que cambiar. No debe tomar la justicia por su mano. Para resolver este tipo de conflictos debe actuar con “mucha serenidad”, y esa actitud solo se adquiere por una concienciación religiosa, por un compromiso moral, por el “temor a Dios”.
La igualdad “de género” que pretenden las feministas es ¡imposible! La igualdad “hombre - mujer” sí es posible, pero no en todo.
Las feministas y las instituciones se empeñan en dictar duras normativas para erradicar la violencia de género. Me parece que, aunque algo ayuden, son inútiles. En última instancia la violencia de género hay que prevenirla desde pequeños, pues es una cuestión de amor, de amar, de querer a una persona, de buenas costumbres, de moral, de “temor a Dios”.
Otra cosa que quiero decir es que la historia de nuestra Guerra Civil cada uno la contamos a nuestra manera. Hay unas discusiones sobre el tema que nadie se pone de acuerdo y algunos, pretenden “darla la vuelta” (a la Historia).
En nuestra Guerra Civil hubo “dos bandos”. ¿Sí o no?
Uno de ellos quemaba iglesias y quería “volver a matar a Jesucristo y su doctrina”. ¿Sí o no?
Quería dividir España, trocear España en “pequeñas nacionalidades” para que España, como nación, desapareciese del mapa. ¿Sí o no?
El otro bando quería preservar a toda costa “la unidad de las regiones” en una “Gran Nación” que se llama España. ¿Sí o no?
Quería que España no desapareciese, preservar su unidad, sus tradiciones, su religión y sus costumbres. ¿Sí o no?
En el tiempo que vivimos, después de 80 años y para corroborar lo anterior, hay políticos “enemigos de España” que quieren repetir “la misma jugada”. ¿Sí o no?
También algunos intelectuales los apoyan y “les dan la razón”. ¿Sí o no?
Visto lo anterior ¿ustedes con cuál de los dos bandos se irían?...
¡Pues eso fue nuestra Guerra Civil!
En "El Valle de los Caídos" el único que no debe estar es Franco: porque no es "un caído en la guerra". Debe ser enterrado en otro sitio.
La banda terrorista E.T.A. en el día de hoy, 7 de abril de 2.017, ha dado un comunicado de que entrega las armas, pero advierte que "no tiene el control de todo su arsenal". Es la “maldad” de una banda terrorista y la de sus colaboradores (ninguno de fiar) , que deriva de nuestra Guerra Civil, reflejada en un "simulacro de desarme”.
Todos los asesinados por la banda terrorista E.T.A son “inocentes a su causa".
Las muertes “inútiles” de miembros de E.T.A. y los asesinados por esta, (unos por malos compatriotas y otros por víctimas) han herido al propio pueblo vasco, ¡tan noble y lleno de virtudes!.
A los miembros de E.T.A. se les puede llegar a comprender algo en sus reivindicaciones pero..., además de querer conseguirlas matando a gentes inocentes, están tremendamente equivocados: el mundo va hacia adelante, no hacia atrás.
E.T.A. y sus colaboradores se han igualado en “maldad” al bombardeo de Guernica.
Estos días hay una noticia que nos ha sorprendido.
Esto es alucinante y cuesta mucho creerlo pero... ¿por qué no puede ser verdad si nos lo han contado y asegurado hace mucho tiempo y muchas veces?
Es alucinante saber que en algún lugar hay gente eternamente viva ¡donde también podemos ir nosotros!
En la “Gaudium et spes”, que es el título de la única constitución pastoral del Concilio Vaticano II, solemnemente promulgada el 7 de diciembre de 1965 por el papa Pablo VI, nos habla de una tierra nueva y un cielo nuevo:
39. Ignoramos el tiempo en que se hará la consumación de la tierra y de la humanidad. Tampoco conocemos de qué manera se transformará el universo. La figura de este mundo, afeada por el pecado, pasa, pero Dios nos enseña que nos prepara una nueva morada y una nueva tierra donde habita la justicia, y cuya bienaventuranza es capaz de saciar y rebasar todos los anhelos de paz que surgen en el corazón humano. Entonces, vencida la muerte, los hijos de Dios resucitarán en Cristo, y lo que fue sembrado bajo el signo de la debilidad y de la corrupción, se revestirá de incorruptibilidad, y, permaneciendo la caridad y sus obras, se verán libres de la servidumbre de la vanidad todas las criaturas, que Dios creó pensando en el hombre.
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En cuestiones de religión nos fijamos más en los pecados del mensajero que en el mensaje. Criticamos a los curas y a la Iglesia pero no meditamos la palabra de Dios que nos transmiten, que es el Evangelio, ¡una gran noticia para nosotros!
Ponemos y tenemos como referencia “la vida” de otros hombres, ¡y nos perdemos!
Como todas estas cosas escatológicas me superan voy a seguir hablando de fútbol.
Con pena tenemos que finalizar estos relatos pues nuestros recuerdos del fútbol arijano no dan más de sí.
Desde que en Arija, los chavales jugábamos con pelotas de trapo y con un balón que cuando se pinchaba se nos quedaba “cuadrado” (como un dado), el fútbol ha cambiado muchísimo, pero sigue siendo “el rey” de los deportes.
En la “Plaza Nueva” los chavales jugábamos al fútbol con pelotas de trapo y porterías hechas con “prendas”, “piedras” o “palos”.
Aquellos partidos jugados de chavalines (ahora se llaman alevines o infantiles), jugados con un entusiasmo indescriptible, lo mismo con pelotas de trapo que con balones pinchados (El balón cuadrado), nos servían de desfogue, de aprendizaje y de hacer amistades; hacer nuevos amigos pues los partidos eran limpios, sin el menor atisbo de violencia, ni de insultos, ni de enfados. El fútbol que jugábamos de niños era pura diversión, sin intervención de padres ni de gentes mayores.
Parece ser que ahora ya no es lo mismo. En el fútbol infantil hay muchos conflictos e intereses vergonzantes desarrollados por los propios padres de los chavalines. Estamos cambiando “el valor” de las cosas, el concepto moral de nuestras acciones.
“Naranjito”, el primer aficionado de España, “gran enamorado del fútbol”, está avergonzado por las cosas que pasan en este deporte.
“Naranjito”, que es “un forofo del fútbol” vive angustiado porque el fútbol ya no es lo que era: un deporte sano para el divertimiento.
“Naranjito”, que siempre ha tenido la cara colorada por su buena salud, cada día la tiene más colorada de pura vergüenza.
“Naranjito”, no tiene capacidad suficiente en su mollera para entender que hay aficionados que para ver un partido llevan escondidas debajo de la chaqueta, navajas y palos.
“Naranjito”, no tiene capacidad intelectual para entender que unos aficionados viajen miles de kilómetros para ver jugar a su equipo y vayan a los estadios borrachos.
“Naranjito”, se queda atónito porque los padres de los chavalines que están aprendiendo a jugar al fútbol se pelean entre ellos e insultan a los niños del equipo contrario.
“Naranjito”, no entiende que, para animar al equipo de casa, haya que tirar bengalas incendiarias con el consabido peligro para los espectadores.
“Naranjito”, está completamente avergonzado porque dos aficiones de distintas ciudades quedan antes del partido par con premeditación y alevosía pegarse, incluso matarse, sin ir a ver el partido.
“Naranjito”, no comprende por qué un simple balón de fútbol, por atravesar una raya blanca, atraiga a tanta gente a los estadios que por verlo están dispuestos a gastarse la paga de un mes.
“Naranjito”, no entiende que cuadrillas de aficionados acudan al partido emboscadas con pañuelos, viseras, bufandas, piedras y palos, para provocar a los del equipo contrario.
“Naranjito”, vive asustado al ver como los aficionados salen del estadio con el corazón en la garganta, ¡angustiados! porque su equipo no ha ganado.
“Naranjito”, no puede entender que haya partidos oficiales todos los días de la semana: por la mañana, a mediodía y por la noche.
“Naranjito”, está con el corazón encogido porque, “la mafia”, amaña los resultados de los partidos con vistas a beneficiarse de las apuestas deportivas.
“Naranjito”, no comprende que por dar patadas a un balón, algunas personas ganen más dinero “en un día” que otras trabajando ¡toda la vida!
A pesar de todas las comparaciones, el fútbol, deporte o circo, sigue siendo el rey de los espectáculos, con tantos aficionados que día tras día llenan los impresionantes estadios, algunos con capacidades de hasta 100.000 espectadores.
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Los modernos estadios han sustituido al circo romano de los gladiadores. La pelea que en los coliseos antes se hacía con espadas, escudos y porras, ahora se hace en los estadios con un balón de fútbol: por cierto, ¡cada día más bonito! Una forma “muy inteligente” de pelear y comparar fuerzas pero que, ¡por el dinero!, se está yendo por otros derroteros.
En el fútbol también hay una cosa que es incuestionable: nos sorbe demasiado el seso. Sigue habiendo muchos aficionados que no tienen otra vida que “el fútbol”. Sus ídolos y su equipo absorben toda su capacidad de vivir. No ven de vida más allá que, “su jugador”, es el mejor del mundo, o que, “su equipo”, va el primero en el campeonato.
También se dice que el fútbol sirve para acallar o embobar a los jóvenes que tienen inquietudes políticas o religiosas, para que no se revelen mucho pensando en cosas más transcendentes.
El fútbol, deporte, espectáculo, diversión, o circo no va a morir nunca. Continuamente, año tras año, salen unos chavalines que es maravilla verlos jugar. Lo peor de todo es que los clubes poderosos fichan jugadores de cualquier parte del mundo ahogando a nuestra cantera.
Nuestros jugadores se desaniman en el esfuerzo de los entrenamientos, porque el puesto que les corresponde en el equipo de la ciudad donde nacieron se lo quita cualquier “mindundi de directivo” a golpe de talonario, dándoselo a un “extranjero” para reforzar al equipo. Como ocurre con los niños en los colegios, que en el equipo de fútbol, por quedar los primeros en los campeonatos, los entrenadores cogen a chavales ajenos al colegio y no a los niños que van a ese colegio. (El fútbol infantil debe ser “diversión”, no “competición”)
Para muchos, Pierluigi Collina, hasta la fecha, ha sido el mejor árbitro de todos los tiempos.
Muchos jugadores le temían porque no soportaba que le reclamasen su decisión de pitar la falta, pues su arbitraje se basaba en la “verdad” y en la “naturalidad”.
Pierluigi Collina nació el 13 de febrero de 1960 en Bolonia, Italia. Debutó en la categoría profesional italiana en 1991. En 1995 se hizo internacional y se retiró en 2005.
Llamaba mucho la atención su autoridad y su aspecto exterior de ojos azules y cabeza rapada. La cabeza, “como una bombilla”, se debía a que a finales de los años 80 sufrió una gran alopecia por la cual perdió todo el cabello haciéndole aún más famoso “su figura” que “sus buenos arbitrajes”.
El buen árbitro quiere que todo vaya por buen camino y con su justicia reprende y enseña.
Definitivamente el dinero se ha apoderado del fútbol.Se maneja “muchísimo” dinero alrededor del fútbol.
Se construyen enormes estadios con capacidad para miles de aficionados. Los clubes, por no quedarse atrás fichan a los mejores jugadores del mundo pagando verdaderas millonadas aunque el club “se empeñe para muchos años”. Las televisiones se hacen dueñas de las retrasmisiones de los partidos exigiendo a los televidentes “un prepago” si quieren ver el partido. Hay partidos de fútbol, de competición, casi todos los días de la semana. Hay variedad de apuestas. En muchos partidos ha habido sobornos a jugadores, a árbitros y a directivos para intervenir a su favor en las apuestas o en la permanencia del club en una determinada categoría.
Precisamente estos días, concretamente el 1/04/2.017, hay una escandalosa noticia en los periódicos referente al “fraude en las apuestas deportivas”.
Resulta que el Barcelona “B” ha protagonizado una de las goleadas "12-0" de la historia del fútbol español al Eldense.
El resultado es debido a la posible participación de jugadores del Eldense en una trama de apuestas deportivas fraudulenta, dejándose ganar el partido con un resultado de ¡escándalo!, ha denunciado el jugador del Eldense, “Cheikh Saad”.
El abultado resultado del partido ha levantado sospechas y han sido detenidos por la policía, el entrenador, el técnico y tres jugadores del Eldense.
La mayoría de los “amaños” se producen en 3ª y 2ªB. El Barcelona “B” y el Eldense juegan en 2ªB.
“Cheikh Saad”, jugador mauritano del Eldense ha confirmado: "Son cuatro los jugadores implicados en la compra de partidos. Me es igual lo que pueda pasar, pero cuando pueda daré los nombres de estos jugadores". Cheikh Saad ha desvinculado a los jugadores del Barcelona B de este caso: los jugadores del Barcelona B hicieron lo que tenían que hacer: “marcar goles”. Ha reconocido también que en el vestuario estuve a punto de llegar a las manos con estos cuatro jugadores de mi equipo.
El jugador del Eldense, “Cheikh Saad”, no quiso jugar este partido aunque su entrenador se empeñaba en sacarle al campo, porque sabía que el partido estaba amañado.
Se investigan otros cuatro partidos del Eldense además del 12-0. El club alicantino ha decidido dar de baja a 12 de sus futbolistas.
El juez que lleva el caso imputa corrupción y organización criminal a los cinco detenidos del Eldense.
Todo un ¡escándalo de dinero! que mata al verdadero deporte. El fútbol termina siendo un 90% negocio y un 10% deporte.
La alegría de marcar un gol con el que ganas el partido es divina, y si es en el último minuto es indescriptible. El rostro de los jugadores se ilumina de una forma muy especial y quien mete el gol se convierte para el equipo y para la afición en un héroe.
Pero la alegría del gol es muy diferente en jugadores mercenarios a jugadores de la cantera. La alegría se refleja irremisiblemente en el rostro de ambos pero sale de diferente manera del corazón. El “amor por el club” lo jugadores lo expresan de diferente manera.
Los jugadores mercenarios el gol se lo dedican al dinero. Los jugadores del club, los del pueblo, los de la cantera, se lo dedican a sus amigos, a la familia, a la afición, a su pueblo.
Los goles hay que disfrutarlos como un deporte que es el fútbol. Con autenticidad deportiva. Sin venganza ni chulería de mercenario. Con el corazón. Que es como los disfrutaban y se manifestaban todos los jugadores de “antes”. Como lo hacían los jugadores del Arija F.C. El fútbol, cuando es limpio y noble, cuando es “diversión” y “deporte”, es ¡¡¡maravilloso!!!
Nosotros, tras el pitido final de estos relatos, también estallamos en alegría si ellos sirven para que el lector descubra o se percate de “alguna cosa importante” que antes de leerlos no se había fijado en ello.
No me queda mucho más dentro de mí que considero pudiera merecer la pena contarlo, así que he decidido poner Punto y… ¡final! a estos relatos sobre el fútbol de Arija. Como el entrenador “Pep Guardiola” que en enero de este año afirmó que "El final de mi carrera como entrenador está próximo". “No voy a estar en el banquillo toda la vida. Lo que siento es que la fase hacia mi adiós es un proceso que ya ha comenzado”.
Corroboro sus palabras porque a mí también me pasa. Como todas las cosas esto se acaba. Es mi muerte, que nunca la acogemos con alegría, como debiera ser, pues con ella nos transforman para vivir en otro sitio mejor.
¡Fin! Se acabó el partido. Con él los relatos, el espectáculo y el circo. ¡Todos a la calle! Cuando algo se acaba todos lloramos.
En los tiempos que vivimos, los clubes poderosos, para considerar que han tenido éxito deportivo ya no se conforman con ganar un campeonato de prestigio de los varios que se juegan. El ganar solo una Liga, o una Copa del Rey, no es suficiente para dar satisfacción a directivos y aficionados, que se quedan muy tristes porque el club rival ha ganado ¡eso y más!
Hemos llagado a tal locura de insatisfacción futbolística, donde los clubes poderosos se gastan miles de nillones de euros por fichar a los mejores judadores del mundo para poder ser mejor que los clubes rivales que, ¡si no se gana todo!, la insatisfacción deportiva nos hace vivir de mal humor.
En el fútbol pasa como todo en la vida. Si ponemos el listón muy alto y no se consiguen los objetivos, vivimos tristes... “¡teniendolo todo!”.
Los aficionados de Arija eran felices porque se conformaban con poco, ¡que era mucho!, cuando el equipo ganaba “el partido de las fiestas”, dando una gran satisfacción a la afición y al pueblo.
En el fútbol profesional no pasa lo mismo. Ponen el listón tan alto que muchos clubes no podrán conseguir nunca la felicidad deportiva de ganar un campeonato importante. Así se frustra y se desencanta la afición siendo que muchos clubes tienen que estar ¡muy orgullosos! por conseguir lo que consiguen con su potencial futbolistico.
Como ejemplo de esto ponemos al Athletic Club de Bilbao, que le será dificil conseguir campeonatos de los grandes, pero sus meritos deportivos son mucho más grandes que la de los grandes, porque todo lo que consigue es con chavales salidos de la cantera que se enfrentan con mucha valentía a clubes que tienen a golpe de talonario los mejores jugadores del mundo.
Ya, los clubes poderosos, para considerar que han tenido éxito no se conforman con ganar un partido, ni una liga, ni una liga y una copa del rey; ni siquiera una liga con una copa del rey más la UEFA. No, no. Para considerar que un club de fútbol ha tenido éxito tienen que ganar la Liga, la Copa del Rey, las dos Supercopas, la Champions Ligue, y el Mundialito. “Seis campeonatos de primerísima categoría mundial”. Pero esto... ¡no basta! ¡Hay que ganarlos todos en una misma temporada!
¿Por qué esto? Porque hay un club que esto ya lo ha hecho y hay que superarle y si no se le supera es ¡fracaso futbolístico!
El gran esntrenador y fabuloso jugador Pep Guardiola también llora. Se termina el encuentro. Pero... ¿por qué llora Guardiola?
Tras el pitido final del partido, el español Guardiola, gran conocedor de los secretos del fútbol, rompió a llorar porque se convierte en el técnico que más títulos conquista con un club en un solo año. Fue como entrenador del equipo azulgrana en el año 2.009 que ganó, de manera consecutiva, los seis títulos a los que aspiraba el equipo: Copa, Champions League, Supercopa de Europa, Copa Mundial de Clubes, Copa Liga Española, Copa del Rey y la Supercopa de España.
De este modo Guardiola se convierte en el primer entrenador de fútbol en el mundo en conseguir “seis títulos oficiales en un mismo año”. Solo otros seis equipos europeos han logrado el denominado “triplete” pero ninguno la de haber conseguido ¡seis trofeos! en un mismo año natural.
Pep Guardiola cerró un año mágico al conquistar un pleno de títulos con el Barcelona. ¡Seis de seis! El técnico del Barcelona no aguantó al final del encuentro y, cuando esperaba junto a su cuerpo técnico sobre el césped del Zayed Sports City, un estadio que se encuentra en Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos) cuando les entregaron la copa de campeones del Mundial de Clubes, rompió a llorar.
Guardiola quería disimular su “gran satisfacción deportiva” tapándose la cara con las manos para que no le viesen llorar, pero las implacables cámaras de la televisión que descubren a grandes distancias el más mínimo gesto le delataron y sus compañeros y jugadores se acercaron para abrazarle y le zarandearon para restarle tensión al momento. Mientras, Pep Guardiola, seguía sin poder detener las lágrimas.
Los clubs de los grandes entrenadores fichan a los mejores jugadores del mundo. Sin querer quitarle ningún mérito a Guardiola, también yo ganaría partidos con... ¡esos jugadores!
Presentamos las seis copas que el entrenador Pep Guardiola ganó en una misma temporada, la temporada 2.008 – 2.009, siendo entrenador del Fútbol Club Barcelona. Este record, de momento, no ha sido igualado por ningún club del mundo. La locura del fútbol sigue, porque habrá clubes que quieran batirlo.
DA MÁS VUELTAS QUE UN 
DA MÁS VUELTAS QUE UN 
EN ARIJA, EL FÚTBOL ERA DEPORTE. Y EL DEPORTE ES ...
¡¡¡MARAVILLOSO!!!
